¿Cuántos no sufren de fobias en nuestros días? La respuesta es “muchos”. De hecho, se dice que cada ser humano ha experimentado alguna de las cinco fobias más comunes que son la agorafobia, claustrofobia, aracnofobia, acrofobia y glosofobia. La agorafobia tiene que ver con el miedo irracional a los espacios abiertos. La claustrofobia tiene que ver con miedo excesivo a los espacios cerrados. La aracnofobia se define como el intenso miedo hacia las arañas. La acrofobia es el miedo a las alturas y la glosofobia es el miedo a hablar en público. ¿Cuántas de estas fobias has experimentado?
Creo que todos, sin lugar a dudas, hemos tenido algún tipo de fobia. La pregunta que surge es, ¿nos dejaremos controlar por ellas? Si las fobias son comunes en los seres humanos, el adoptarlas como una condición de vida es lo que marca la diferencia. En otras palabras, no porque experimentes una fobia momentánea quiere decir que siempre la tendrás. De modo que, enfrenta y encara tus fobias de una manera saludable. He aquí unos pasos: identifica tu fobia, estúdiala, enfréntala con la ayuda de otros y pide ayuda de parte de Dios para vencer tus fobias día tras día. Él te dará la victoria. La Biblia dice en el Salmo 56:3, “Cuando siento miedo, pongo en ti mi confianza” (NVI).