Un Corazón Agradecido

Un Minuto con Dios · 043020 — Un Corazón Agradecido

¿Por qué estas agradecido(a) el día de hoy? ¿Es tu lista de peticiones más larga que tu lista de agradecimientos?
Cultivar un corazón agradecido te preservará de la amargura y de la frustración. La actitud de agradecimiento en el corazón es buena, pero expresada es mucho mejor. Un corazón agradecido puede llegar a experimentar la plenitud en la vida.

“Agradecer” habla bien del corazón y hace que tu corazón hable. Como dicen por ahí: “El agradecimiento si no se dice, no sirve de nada”. Ser agradecido te honra. Los agradecimientos más sinceros nacen de la propia humildad del ser humano. El agradecimiento hacia esa persona que nos ayudó puede llegar a ser eterno. Por otro lado, el agradecimiento, en ocasiones no puede devolverse, no por no querer, sino porque no hay nada que se puede hacer para demostrar lo agradecido que se está. Sin embargo, unas bonitas palabras de agradecimiento siempre serán bien recibidas en cualquier circunstancia, tiempo y momento.

Un amigo mío decía: “Ser gradecido es de un buen nacido”. Esa es toda una verdad en la cual todos tenemos que trabajar. Entonces, ¿podemos ser más agradecidos hoy? La Biblia dice en el Salmo 103:2, “Que todo lo que soy alabe al Señor; que nunca olvide todas las cosas buenas que hace por mí”. (NTV)

Refugio Y Fortaleza

Un Minuto con Dios · 042920 — Refugio Y Fortaleza

Alguien una vez dijo: “Nunca te das cuenta de lo fuerte que eres hasta que ser fuerte es la única opción que tienes”. Esa frase comprende una verdad muy vital, ya que es en los momentos de más debilidad donde nuestra fortaleza puede crecer más. Las cosas más asombrosas de la vida suceden justo en el momento en que estás a punto de perder la esperanza.

La dulzura de una persona se puede ver más fácilmente cuando muestra su fortaleza con supremo sacrificio y dedicada entrega. Cuando los tiempos son difíciles, podemos hallar refugio en Dios. Él es nuestra fortaleza. Cuando una persona se llena de esperanza, se llena de fortaleza, porque entre más crece la carga, más crecerá la fortaleza. Aunque la carga sea fuerte y pesada, Dios ha prometido cargarla por nosotros y alivianar todo nuestro peso. Nada es tan difícil que no pueda conseguir la fortaleza. Pero ¿Qué tipo de fortaleza? Sólo la fortaleza que proviene de Dios, porque la nuestra tiende a decaerse y a menguar a través del tiempo.

¿Deseas que Dios sea tu fortaleza y tu refugio? La Biblia dice en el Salmo 46:1, “Dios es nuestro refugio y nuestra fuerza; siempre está dispuesto a ayudar en tiempos de dificultad” (NTV)

Nunca Te Sueltes De La Mano

Un Minuto con Dios · 042820 — Nunca Te Sueltes De La Mano

Me fascina ver las fotos que muestran cuando mis hijos estaban pequeños y estaban tomados de la mano de papá o de mamá. Dichas fotos nos muestran la confianza, la dependencia y la seguridad que le proporcionaba a ellos el estar agarrados de papá o de mamá. Son fotos únicas, tiernas y sinceras que demuestran la seguridad y confianza de nuestros hijos hacia nosotros como padres en sus primeros años de vida.

De la misma manera, no importa lo que enfrentes en la vida, nunca te sueltes de la mano de Dios. Él nunca nos suelta, aunque nosotros nos soltemos de Él. Su amor de Padre es incondicional, infinito y real. Él nos sostiene con Su mano para no dejarnos caer y nos protege en cada instante de nuestras vidas. ¿Deseas dejarte guiar por Dios? Sólo trata de sostener Su mano. Así como la mujer del flujo de sangre quien dijo: “Si solamente tocara el borde de Su manto seré sanada”, de la misma manera, nosotros podemos ser sostenidos por Su mano sanadora y fuerte. Entonces, no te sueltes de Su mano, porque Él nunca te dejará caer.

La Biblia dice en el Salmo 121:7-8, “El Señor te libra de todo mal y cuida tu vida. El Señor te protege al entrar y al salir, ahora y para siempre” (NTV)

Él Va Delante De Ti

Un Minuto con Dios · 042720 — Él Va Delante De Ti

“Solo necesito que vayas al frente mío para saber por dónde caminar”, fueron las palabras que le dije a un guía quién nos estaba guiando en la selva durante un viaje misionero. ¿Cuántas veces nos hemos sentido confiados al saber que alguien quien conoce el camino va delante de nosotros? Esto nos proporciona confianza, seguridad y estabilidad en lugares y terrenos desconocidos.

Lo mismo pasa con nuestra vida espiritual y emocional. Cuando sabemos que alguien va al frente de nosotros, quien ha conquistado todo tipo de temor, enfermedad, condición social y hasta la muerte misma, cambia radicalmente la manera de pensar y la manera de vivir.

El Dios que estuvo contigo ayer, estará contigo hoy, mañana y siempre. Dios nunca te abandonará, tan sólo confía en Él. Él va delante de nosotros. Él conoce el camino, te dirige, te da las fuerzas, te levanta cuando te caes, te conduce por el camino correcto cuando tiendes a perderte y te acompaña hasta que llegues al lugar que Él tiene para ti. Él te acompaña en toda tu vida, ¿deseas Su compañía? La Biblia dice en Deuteronomio 31:8, “No temas ni te desalientes, porque el propio Señor irá delante de ti. Él estará contigo; no te fallará ni te abandonará»” (NTV)

Inquietudes

Un Minuto con Dios · 042620 — Inquietudes

Vivimos en un mundo de inquietudes. Estamos inquietos por el presente que no podemos controlar y por el futuro que es incierto. Estamos inquietos por los muchos factores que afectan nuestra vida, pero también por las incertidumbres e inseguridades que enfrentamos a diario. Sin embargo, “nuestra vida no debe estar marcada por las inquietudes que generan ansiedad, sino por la fe que produce felicidad”.

Las inquietudes usualmente nos producen ansiedad, nos quitan el sueño y nos roban la paz. Alguien dijo: “Las inquietudes pueden convertirse en fobias y en sombras que empañan nuestro caminar”. Las inquietudes también pueden ser dulces experiencias que son una antesala para experimentar la paz. Aunque tengamos muchas de ellas, Dios siempre tendrá una palabra de paz y de verdad.

De modo que podemos depositar todas nuestras inquietudes ante el trono de Dios. Él sabe como lidiar con cada una de ellas, proporcionarnos tranquilidad y darnos de Su infinita paz. La Biblia dice en Juan 14:12, “Les digo la verdad, todo el que crea en mí hará las mismas obras que yo he hecho y aún mayores, porque voy a estar con el Padre” (NTV).

Memorias

Un Minuto con Dios · 042520 — Memorias

¿Qué hay en tus memorias? ¿Hay buenos y malos recuerdos? ¿Hay palabras de edificación y palabras que han tratado de derribar nuestras vidas? ¿Hay imágenes que deseamos revivir y otras que deseamos borrar? ¿Hay personas que han pasado, pero aún siguen allí como si estuvieran vivas? Creo que esto y mucho más está en nuestra memoria. Sin embargo, la memoria está diseñada como parte integral de nuestra vida para ayudarnos a vivir de la mejor manera posible.

Es por la memoria que podemos movernos, tener buen uso de todos nuestros sentidos, comunicarnos, disfrutar de todas nuestras articulaciones externas, gozar de nuestras emociones y almacenar en nuestro intelecto las más gratas lecciones que nos ayudan a vivir. Es por la memoria que podemos hacer remembranzas de los episodios más épicos de nuestra vida y de la misma manera, bloquear aquellos que parecen convertirse en un tormento para el diario vivir.

Como dicen por ahí: “Recordar es vivir”. Pero, recordar no es solo un concepto de memoria, recordar es esencial para poder vivir. Sin poder recordar, no podríamos comer, caminar y muchas de las cosas que son comunes en nuestro diario vivir. ¿Qué tal si recordamos lo que Dios ha hecho? Dios desea bendecirnos aún a través de nuestras memorias, ¿Dejarás que Él lo haga? La Biblia dice en 1 Crónicas 16:12, “Recuerden las maravillas y los milagros que ha realizado, y las resoluciones que ha dictado” (NTV)

Milagros

¿Crees en los milagros? Muchas personas no creen en los milagros hoy en día. Los milagros nos muestran al dador y Creador de la vida. Nos muestran Su poder y autoridad. Los milagros existen para corroborar que Dios es real y supremo sobre todas las cosas. Todos los días vivimos por un milagro porque Dios se mueve de maneras supremamente sorprendentes.

Pero, ¿para qué más existen los milagros? He aquí una simples razones: “Para mostrar el poder absoluto de Dios, para respaldar la obra de Dios en la tierra, para que los incrédulos crean y para traer gloria a Dios”. Sin embargo, te puedo decir que la Biblia habla del milagro más grande. Nos dice que todos nacemos muertos por nuestros “pecados hasta que Cristo nos da una vida nueva”. Es decir, Él nos resucita de la muerte. Ese es el milagro del “nuevo nacimiento”. El milagro de estar muertos y ahora vivos a través de Él.

La historia, la Biblia y nuestras propias experiencias testifican del gran poder restaurador y transformador de Jesús. Cobra ánimo el día de hoy en saber del poder transformador de Dios. Si necesitas un milagro de Dios, te invito a que hagas lo siguiente: Ora, espera y confía en fe. La Biblia dice en Jeremías 32:27, “Yo soy el Señor, el Dios de toda carne, ¿habrá algo imposible para mí? (NTV)

Duelo

Todos tenemos episodios de duelos en nuestra vida. Cualquiera y sea la causa, las pérdidas son dolorosas y son completamente normales y entendibles. Sin embargo, ese dolor necesita de aliento y consuelo. La Biblia dice que Dios está familiarizado con las pérdidas y nos puede dar aliento y consuelo cuando nuestros corazones están desechos y en duelo. Si necesitas un hombro donde recostar tu dolor y llorar, los brazos de Dios están abiertos para consolarte y animarte. Él entiende tu duelo.

¿Por qué? Jesús lloró. Él lloró en la tumba de su amigo Lázaro y conoce el duelo. Él también secó las lágrimas de la mujer pecadora quien lloró a sus pies derramando un perfume muy costoso con un acto de adoración. Él puede secar nuestras lágrimas. Jesús es paz. Él nos ha prometido Su paz y nos la proporciona en cada momento que la necesitemos. Él es nuestro consuelo. Él conoce el todo de nuestro corazón y sacia todo nuestro ser. La Biblia dice en 2 Corintios 1:4, 4 Él nos consuela en todas nuestras dificultades para que nosotros podamos consolar a otros. Cuando otros pasen por dificultades, podremos ofrecerles el mismo consuelo que Dios nos ha dado a nosotros” (NTV)

Desánimo Inevitable

El desánimo es inevitable en la vida. Hasta la persona más optimista del mundo experimenta episodios de desánimo en su diario vivir. Pero, ¿cómo enfrentar el desánimo? He aquí algunas pautas: Encuentra la causa. Es una causante de desgaste o enfermedad física, es una razón emocional o sentimental o es un distanciamiento espiritual con tu Creador. En segundo término, evalúa tu realidad. No minimices tus problemas ni exageres o saques fuera de proporción tu realidad. No vivas en una realidad ilusoria, sino en la que debes vivir. Recuerda de buscar ayuda profesional y espiritual cuando sea necesario. Muchas veces necesitamos ser escuchados, afirmados y valorados. En otras ocasiones, debemos ser desafiados, confrontados y corregidos.
Por otro lado, es importante encontrar una actividad que te produzca ánimo y evita juntarte con personas pesimistas y desanimadas. De la misma manera, elimina las relaciones o actividades que te roban tu gozo y contentamiento. Simplifica tu vida. Sobre todo, desarrolla las disciplinas espirituales: Ora, lee a Biblia, medita, ayuna, confiesa y dedica un tiempo diario de reflexión íntima y comunicación con Dios. Estos son sólo unos pocos pasos que te ayudarán.

La Biblia dice Deuteronomio 31:6, “6 Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará”. (NTV)

Aceptación Personal

Uno de los problemas psicológicos más grandes en nuestros días esta relacionado con la baja autoestima que genera una falta de aceptación personal. Muchas personas no se aceptan como son y quieren ser alguien más desde la niñez. Al pasar de los años, esa falta de aceptación se acentúa y causa muchos problemas en todas las áreas de la vida. Entonces, ¿qué hacer para movernos hacia la aceptación personal?

Lo primero es aceptar la unicidad personal. Es decir, lo únicos que somos. No hay nadie ni habrá nadie como nosotros, porque todos estamos diseñados para cumplir un propósito individual. También, debemos descubrir y reconocer nuestros dones y talentos. En otras palabras, la manera como estamos diseñados. Esto nos ayuda a tener un buen criterio de nosotros mismos. De la misma manera, debemos apropiarnos de la identidad que tenemos en Cristo Jesús. Él nos da una nueva vida espiritual cuando le recibimos en nuestro corazón y nos ayuda con cualquier problema de aceptación personal.

Un antídoto para combatir la falta de aceptación individual es el servicio a los demás. El quitar el enfoque de nosotros mismos y ponerlo en los demás, siempre nos ayudará a construir confianza y seguridad en lo que podemos ofrecer a otros. El servicio nos hace útiles, desarrolla nuestras habilidades y nos proporciona seguridad, ¿deseas servir a los demás? Dios te acepta como eres, ¿puedes aceptarle a Él? La Biblia dice en Jeremías 1:5a, “Te conocía aun antes de haberte formado en el vientre de tu madre; antes de que nacieras, te aparté…” (NTV)